Esa primera oleada estará formada por las Radeon RX 580, Radeon RX 570, Radeon RX 560 y Radeon RX 550, cuatro tarjetas gráficas que cubrirán directamente la gama media y la gama baja, aunque en sus tres primeras versiones se tratará de soluciones renombradas.
Esto quiere decir que la RX 580 será una RX 480 renombrada, la RX 570 una RX 470 renombrada y la RX 560 una RX 460 renombrada. Es importante tener en cuenta que con esto no queremos decir que vayan a ser calcos directos de dichas soluciones, sino que su base será la misma.
Así, las tres mantendrán en teoría el mismo conteo de shaders, unidades de textura, unidades de rasterizado y bus de memoria de la generación actual, pero lo más seguro es que presenten mejoras a nivel de eficiencia por la madurez del proceso de fabricación de 14 nm, y que vengan con mayores frecuencias de trabajo.
Por su parte la RX 550 sería una tarjeta gráfica económica que estaría basada en una variante recortada del núcleo gráfico Polaris 11, y que por tanto iría dirigida a aquellos que quieran jugar en condiciones aceptables pero tengan presupuestos muy ajustados.
¿Y que pasa con Vega?
Es una buena pregunta y además necesaria, ya que es lo más atractivo que tiene preparado AMD para este año en el sector gráfico. El gigante de Sunnyvale ha confirmado que Vega llegará al mercado durante el segundo trimestre del año, un dato que agrupa los meses de abril, mayo y junio.Tenemos bastante claro que no asomará en abril, así que lo más probable es que veamos un anticipo en mayo y que la presentación oficial y definitiva se produzca en junio, aprovechando quizá el escenario del Computex.
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